Un antioxidante revolucionario

¿De dónde viene el acido tánico? 

El ácido tánico es un polifenol de la familia de los taninos. Esta presente dentro de muchas plantas, como en la corteza de roblo, Clavo Huasca y los tejos. Se encuentra en todas las partes de la planta, semillas, agallas, conos y tronco.

Este ácido es altamente concentrado en la corteza y el tronco del secuoya para protegerlo de las enfermedades, de los parásitos y de los champiñones, lo que explica su esperanza de vida excepcional: algunos de los secuoyas pueden vivir mas de 3000 años.

Aunque muchos arboles contengan taninos, contenido elevado en secuoya y su color canela explican porque se les llama “Secuoya”.

¿Cómo Alfred Marchal descubrió el ácido tánico?

Analizando cientos de polifenoles en la naturaleza y filtrando los que tenían una capacidad de protección superior a los antioxidantes de referencia, Alfred Marchal se dio cuenta que el acido tánico es muy eficaz para los tratamientos anti-edad y anti-polución, con varias propiedades excepcionales:

• Capacidad de protección superior a los antioxidantes de referencia
• Protege el endotelio de los vasos sanguíneos, lo que explica su eficacia en el tratamiento de moretones y enrojecimientos
• Inhibe la degradación de colágeno
• Eficaz contra los tumores cutáneos
• Inhibe la glicación avanzada
• Actividades anti-fúngicas y antibacterianas
• Inhibe la reacción de Fenton acomplejando Fe3 +

¿Qué es único en la utilización del acido tánico de ALPHASCIENCE?

Como la mayoría de los polifenoles y de los antioxidantes, el ácido tánico es muy instable.

Por primera vez, ALPHASCIENCE logró estabilizar el ácido tánico para poder utilizarlo con una alta concentración en sus formulas y así proteger, restaurar y mantener la integridad de las celdas de la piel, lo que permitió obtener resultados de protección excepcionales.

El acido tánico es muy sinérgico con la vitamina C (acido L-ascórbico) y refuerza su actividad antioxidante.

ALPHASCIENCE es la única empresa que maneja este proceso de fabricación para realizar la buena interacción química entre el acido tánico y la vitamina C y aprovechar de sus mejores capacidades anti-edad y anti-polución únicas.